domingo, julho 15, 2007

IN-SE-PULCROS


Como un gran cuervo que revolotea
sobre una vaca muerta estoy
ando volando sobre los días vividos
y las noches soñadas que jamás serán

Estoy escudriñando en la carroña
de este amor fallecido
en la llanura, en la soledad sin lutos, ni penas.
Ni muerto. Ni vivo. Sólo con larga agonía.

Ahora somos osamentas. Cuerpos podridos
que se confunden con la nada
Buscamos recuerdos
solo quedan nuestros huesos malolientes

Estamos contaminando nuestros espacios
con este amor insepulcro.
No somos capaces de enterrarnos
pero todos los días nos dejamos morir y pudrir.


Fátima E. Rodríguez

Um comentário:

kurubeta disse...

es cierto, incluso algunos ya nacen en el cementerio, y se van despudriendo hacia la infancia...